El programa, que involucra a niños y adultos, ofrece diferentes oportunidades de formación en artes y oficios; además de un componente importante que es el musical.
Arcenio Angulo Quiñones, quien hace parte del proceso, indicó que la participación fue positiva contando con la asistencia de más de 60 niños de escasos recursos económicos, quienes en primera instancia conocen los instrumentos, su origen, sonidos, para luego adentrarse en su interpretación.
“Todo esto dentro del lenguaje de construcción de paz que es lo que promueve el ICBF”, comentó el profesor Angulo Quiñones. Como parte de las acciones trazadas para el cierre del año, se desarrolló el séptimo taller Conociendo mis Emociones, que contó con una buena participación.
Cabe destacar que el programa continuará en el año que comienza involucrando a las comunidades de los diferentes sectores de Tuluá.