En el municipio de Toro, los esposos Carlos David García y Laura Osorio cultivan lechuga crespa verde, utilizando el sistema hidropónico, tarea que desarrollan en una pequeña parcela, en medio de cultivos de uva y guayaba.
La pareja tiene claro que este método se ha convertido en una alternativa, si de cambiar el modelo tradicional de cultivo en suelo se trata.
“Es una manera sencilla de obtener alimentos sanos y de buena calidad”, asegura Osorio, propietaria de Hidrofresh, una marca que ya se empieza a posicionar en el mercado.
Estos dos emprendedores toresanos iniciaron con el proyecto hace dos años, en una terraza en Toro. En sus inicios, cultivaban hortalizas de forma vertical.
Ahora, el proyecto se expandió y en un terreno de 300 metros cuadrados cultivan productos de difícil desarrollo para el clima de la región, como la lechuga crespa, además, están experimentando con tomate chonto y plantas aromáticas.
“En el invernadero cultivamos la lechuga en agua, sin químicos, 100% orgánica y con mayor valor nutricional”, afirmó Laura, al mencionar que el emprendimiento está inscrito en la ventanilla de negocios verdes de la CVC, de la cual reciben acompañamiento y visitas de seguimiento.
“La ventaja de cultivar bajo el sistema hidropónico está en los tiempos de cosecha: en comparación con el sistema agrícola, la lechuga se da más rápido en cultivo hidropónico, hay menor consumo de agua y el producto es más fresco, con hojas más crocantes y de mayor durabilidad en refrigeración” afirma.
Los clientes de la lechuga de Hidrofresh son principalmente restaurantes, aunque también se comercializa en algunos fruver de municipios del norte del Valle.