Durante esa jornada y tras escucharlo, el mandatario nacional le ordenó a la Ministra del Interior y a la Directora de Planeación, no abandonar el recinto sin reunirse con la comisión bomberil y aunque se dio el encuentro y se agendó una reunión en el Palacio de Nariño esta nunca se dio.
“Fuimos convocados a una reunión y media hora antes de la cita la pospusieron y al final la cancelaron, lo que nos hizo perder tiempo y dinero al tener que pagar multas y un día más de hotel”, dijo en diálogo con EL TABLOIDE.
Recordó que en esa ocasión, el presidente Duque habló sobre la atención en temas como la dotación, la seguridad social para los voluntarios y hasta de la implementación de una política pública para el sector, pero todo se quedó en los anuncios.
“Yo a eso que pasó en La Unión lo he llamado una parodia presidencial, pues de todo lo que se dijo no se ha cumplido y parece ser que los ministros no le hacen caso al jefe de estado”, precisó Arango Vásquez.
Panorama desalentador
Al ser consultado sobre la situación de los bomberos en el Valle indicó que es cada día más difícil porque las autoridades del departamento y las municipales no cumplen en buena parte con las normas existentes y los recursos se quedan en las arcas oficiales.
“Es urgente que la Política Pública pase del dicho al hecho y poner en marcha la Ley del Voluntariado, que atienda las necesidades básicas, que se cumpla con la 1575 de 2012 que ordenó el desembolso de 25 mil millones de pesos para los bomberos del país, recursos que hasta ahora no se han visto” precisó.
Lamentó el vocero bomberil que los cuerpos de socorro hayan sido excluidos de los planes de desarrollo nacional, departamentales y municipales, lo que hace más complejo el panorama.
Frente a la pandemia del covid-19 indicó que los bomberos han sido invisibles, a tal punto que han distribuido elementos de protección para todos menos para los organismos de socorro.
“Solo han dado unos tapabocas y pare de contar, pero igual seguimos yendo a las emergencias arriesgándonos a los contagios pues somos bomberos pero no inmunes a la enfermedad”, puntualizó el capitán Rafael Arango Vásquez.