De acuerdo con lo informado, de la actividad tomaron parte los niños de estos sectores asumiendo todos los protocolos de bioseguridad, y garantizando su derecho a una hora diaria de esparcimiento.
Resaltaron los encargados de la actividad la buena respuesta de los habitantes de estas zonas rurales, quienes aprovecharon para impregnarse un poco de la magia que guardan los libros y sus historias y que ganan trascendencia en estos días donde lo digital capta la atención de este segmento poblacional.