“Más del 50% de las mujeres perdieron sus empleos, porque la mayoría se emplean en labores informales, por ejemplo, en el sector turístico, uno de los más afectados y que no se ha podido reactivar, cuenta con un 70% de fuerza femenina. Al menos un 50% de mujeres no pudo volver a sus estudios ni a su trabajo”, indicó la titular de esa dependencia, Yurany Romero.
Indicó la funcionaria que la situación generada por el covid-19 retrasó al menos 10 años la lucha que se da por la reivindicación de la igualdad de condiciones y posición laboral.
DATO: De acuerdo con las estadísticas entregadas, más del 50% de las mujeres quedaron cesantes en la pandemia.
“Necesitamos que nos empleen en igualdad de condiciones y con salarios iguales. Sin decir que los hombres no se preparan, podemos asegurar que las mujeres somos más estudiadas, pero no ocupamos cargos con toma de decisiones y no contamos con un buen nivel salarial”, insistió la funcionaria seccional.
Recordó Romero que este panorama pone en evidencia una problemática que enfrentan las mujeres, como es la violencia patrimonial.
Cifras que preocupan
Según el Observatorio Para la Equidad de las Mujeres en el valle, durante el confinamiento por la pandemia de covid- 19 en el 2020, 14.800 mujeres fueron obligadas por sus parejas o un familiar a entregar sus salarios o ahorros, 24.870 recibieron amenazas de ser sacadas de su casa sino cumplían alguna petición, a 8.240 les prohibieron estudiar o trabajar, a 5.070 les quitaron parte o todo su salario y a 32.000 les restringieron el acceso a dinero o comida.