El presidente Petro fue rotundo. Escribió en su X que he ordenado realizar una operación con bombardeo sobre una estructura armada del Clan del Golfo en Segovia”, el resultado lo comunicó después el Ministro de Defensa.
Fueron muertos Hitler y Neymar junto con 7 miembros del Clan en las veredas Arenales y Montefrio de Segovia y decomisados 13 fusiles. No hay duda, el Clan se equivocó. Estiró tanto el resorte hasta que por fin se reventó.
El espolón para que el Presidente y su nuevo Ministro de Defensa rompieran la línea blandengue, que en aras de la casi fracasada Paz Total ha mantenido el gobierno de izquierda desde hace tres años, fue la miserable muerte del reconocido líder minero de la región, Jaime Gallego, el popular «Mongo», quien era un activista de la Colombia Humana y había participado como candidato a la alcaldía de Segovia por el Pacto Histórico.
Tacaron burro los del Clan porque despertaron la furia leninista del presidente y lo que se puede venir ahora es el operativo del gobierno Petro contra al menos la banda de traquetos que dirige Chiquito Malo y, por qué no, contra otros que cometan igual equivocación. No es fácil predecir el desarrollo. El Clan es una agrupación suigéneris, que habitualmente no anda en campamentos sino en patrullas móviles por 14 departamentos del país.
Además, como en su seno se han reciclado antiguos guerrillos y paracos y curtidos productores y comercializadores de cocaína y oro, es muy probable que su accionar resulte sorpresivo para las fuerzas constitucionales. Tanto, que pueden no dar batalla frentera sino seguirse moviendo con la misma habilidad que poseen para cobrar las extorsiones y controlar la atemorizada y desprotegida burocracia de los municipios donde campean.
Habrá que esperar, pero como ha sido Petro y el general Sánchez quienes tomaron la iniciativa, no hay duda que la Guerra contra el Clan empezó. Y ahora si hay ministro.Es militar y corajudo.