Según relata, su lucha inició ante la Registraduría Nacional, donde luego de su respectivo proceso logró hacer el cambio de nombre y sexo en el documento.
Seguido a esto, acudió a la Policía Nacional, donde también tuvo que hacer el cambio de identidad. Luego de ingresar a la institución como hombre, ahora es reconocida como una mujer.
A esta mujer trans de 1.80 de estatura únicamente hay un cambio que dice que le hace falta, su voz. Es por eso que se someterá a una cirugía para, según ella, tener la voz que encaja con el cuerpo y el uniforme que tiene.
Después de esto, dice que se realizará la cirugía de reasignación de sexo.