El movimiento telúrico ocurrió a una profundidad de 30 kilómetros, a menos de 10 km del casco urbano, y fue sentido también en varias ciudades de Colombia.
El alcalde de Esmeraldas, Vicko Villacís, confirmó que más de 60 viviendas colapsaron por completo. Además, se reportaron árboles caídos, calles bloqueadas y cortes generalizados de luz y agua, lo que agrava la situación en medio de la emergencia. “Estamos haciendo un levantamiento de daños. La ciudad está prácticamente paralizada”, señaló.
El temblor fue percibido con fuerza en varias regiones de Ecuador y Colombia, incluyendo Guayaquil, Quito, Ipiales, Pasto y Cali. Desde redes sociales, testigos describieron escenas de pánico y compartieron imágenes de casas destruidas y estructuras colapsadas.
Las autoridades mantienen la alerta ante posibles réplicas y recomiendan a la población mantenerse en espacios seguros. Este es el tercer sismo de gran magnitud que afecta a Esmeraldas en los últimos diez años, reviviendo el temor de una zona altamente vulnerable a movimientos telúricos.