Y es que desde que el viernes 8 de diciembre, día en el que se encontró el cuerpo sin vida de la menor de edad, se han conocido aterradores detalles de este crimen. Según el informe de la Policía, la niña salió en la noche de las velitas, alrededor de las 8 de la noche, a realizar algunas compras a una tienda cercana.
No obstante, en el trayecto el asesino la llevó hasta un taller de carros bajo la modalidad de engaño y allí la asesinó.
El presunto asesino fue identificado como Harold Andrés Echeverri, quien se desempeñaba como vigilante en el taller. Desde su captura el lunes 11 de diciembre, la familia de la niña, así como la comunidad en general ha pedido un castigo ejemplar contra este sujeto.
Además de este caso que indignó a Colombia, en el país se han conocido terribles crímenes por parte de sujetos sin escrúpulos que terminaron con la vida de menores, algunos de ellos incluso de sus propios hijos. A continuación recopilamos algunos de los casos más sonados y mediáticos.
Gabriel Enrique González, sujeto que indignó a Colombia asesinando a su propio hijo
Alerta Tolima
En tiempo récord localizaron al hombre que se movilizaba de Melgar a Girardot y quien ofreció $50 mil
El caso de Gabriel Enrique González, el sujeto de 50 años que asesinó a su hijo el 4 de octubre de 2022, Gabriel Cubillos, en la habitación de un hotel en Melgar, indignó al país hace un par de meses.
Este sujeto le confesó a los investigadores, la forma en la que llevó a cabo el crimen. Su relato es desgarrador y completamente frío.
En un intento de vengarse de su exesposa, este sujeto le arrebató la vida a su hijo de cinco años, al que llevó engañado al vecino municipio de Melgar, asegurándole que estaban de paseo y que pronto irían a piscina
“Lo asfixié con la almohada de la habitación y tuve que usar todo el peso de mi cuerpo, porque el niño intentó defenderse”, confesó el sujeto a la justicia,
El sujeto murió el 28 de marzo pasado en la cárcel de Picaleña tras haber tratado de quitarse la vida.
Orlando Pelayo, y el asesinato de un bebé que indignó al país
Colprensa – Orlando Pelayo
La historia del pequeño Luis Santiago Pelayo, que tan solo tenía 11 meses, conmocionó a toda Colombia en el año 2008, luego de que se conociera su asesinato a manos de su padre, Orlando Pelayo, quien fue el actor intelectual de su secuestro y que poco después accedería a abandonar el cuerpo al interior de una bolsa en una de las vías que conducen al municipio de Chía.
Todo empezó cuando una pareja residente en Chía alertó a las autoridades sobre la desaparición de su hijo, Luis Santiago, un bebé de apenas 11 meses de edad. La sorprendente actitud de Orlando Pelayo, el padre, al aparecer en televisión solicitando que no dañaran a su hijo, se quedó grabada en la memoria colectiva del país.
Paradójicamente, fueron los propios delincuentes responsables del secuestro quienes delataron a Pelayo, lo que condujo a su arresto. Sin embargo, la revelación posterior arrojaría una realidad aún más sombría.
Tras el secuestro, el padre y sus cómplices trasladaron al bebé a un cerro, donde lamentablemente falleció asfixiado con una bolsa dentro del vehículo. Días después, el cuerpo sin vida de Luis Santiago fue encontrado abandonado en un área boscosa, ubicada a dos horas de Bogotá.
En una entrevista con La FM en ese mismo año, Pelayo confesó que la motivación detrás del secuestro estaba relacionada con chantajes, ya que el bebé era fruto de una relación extramatrimonial, información que su entonces esposa desconocía. En sus propias palabras, Pelayo explicó:
“No aguantaba ese hostigamiento y chantaje. Prácticamente me tocaba estar con ellos (Luis Santiago y la mamá del niño) día y noche, y la presión de que mi esposa no se fuera a enterar me tenía desesperado”, dijo el sujeto que falleció en la cárcel de Valledupar el pasado 21 de abril.
Rafael Uribe Noguera y el atroz asesinato de Yuliana Samboní
Colprensa
Diciembre de 2016. Yuliana Samboní fue víctima de Rafael Uribe Noguera, un prestigioso arquitecto que violó y luego estranguló a la pequeña indígena de 7 años.
El domingo 4 de diciembre de 2016, Yuliana estaba jugando en el barrio Bosque Calderón cuando fue raptada por Rafael Uribe Noguera y posteriormente abusada sexualmente y asesinada.
El confeso asesino ya había visto a la niña en otras ocasiones, tras merodear esa zona de la ciudad. La desaparición de la menor empezó a ser investigada por un grupo especial de la Policía que logró identificar el vehículo en donde Yuliana fue raptada.
Yuliana ingresó con vida al edificio Equus 66 y allí, en circunstancias que aún no son claras, fue asesinada. Francisco y Catalina Uribe llegaron hasta la residencia de su hermano, tras una llamada que él mismo les hizo en donde confesaba que había hecho algo malo.
“Encontré un zapatico blanco de una niña, ahí el mundo empezó a cambiar”. De esta forma, Francisco Uribe Noguera relató lo que ocurrió en el parqueadero del edificio Equus 66 cuando revisaba la camioneta de su hermano Rafael.
Cabe mencionar que por este caso Rafael Uribe Noguera fue condenado a pagar 51 años y 10 meses de prisión por la muerte de Yuliana Samboní, tras haber sido hallado culpable de los delitos de feminicidio, secuestro y acceso carnal violento agravado.
Garavito, la bestia
Archivo
Luis Alfredo Garavito, falleció en una clínica de Valledupar a sus 66 años.
El pasado 12 de octubre se conoció la noticia de la muerte de Luis Alfredo Garavito, el infanticida que asesinó a más de 200 menores y conocido como ‘La Bestia’ o el ‘Monstruo de Génova’.
Entre los años 1992 a 1999 Colombia vivió un capítulo escalofriante por la cantidad de asesinatos, torturas y abusos a menores de edad a manos de Garavito, quien finalmente fue capturado y permaneció en prisión hasta el día de su fallecimiento.
Aunque en 1992 se conoció de su primer asesinato, su carrera delictiva inició a sus 15 años de edad, cuando se dice que habría intentado abusar de uno menor que él.
Sin embargo, fue capturado hasta el año 1999 donde fue condenado a 40 años de prisión, la máxima pena de Colombia, por los delitos de homicidio, acceso carnal violento y secuestro simple.
Garavito murió en la Clínica Nueva Santo Tomás del Caribe de Valledupar, a sus 66 años, por leucemia. No obstante, mientras permanecía tras las rejas, confesó una serie de horrores, dejando información que sirvió para, además de ubicar los cuerpos de sus víctimas, conocer sus oscuros pensamientos.