Algunos allegados a la joven, quien también trabaja realizando algunos procedimientos estéticos, indicaron que, precisamente salió en horas de la tarde a hacer una de esas labores y luego fue dejada en el apartamento, donde reside Manuela, por una de sus compañeras.
En horas de la noche del viernes 15 de diciembre la joven se estaba comunicando por chat con una de sus familiares y abruptamente dejó de hacerlo, hecho que llamó la atención, además, porque debía viajar a Tuluá y nunca llegó.
Por eso hoy, a primera hora, su padre y otros familiares se desplazaron hasta Pereira y al llegar al apartamento encontraron el teléfono de la joven pero no a ella y hasta el momento no se sabe nada de su paradero.
En este momento Manuela, que es integrante de una reconocida familia tulueña, es buscada también por las autoridades quienes fueron alertadas de su desaparición.