Según lo afirmado por el director del Instituto de Medicina Legal del suroccidente colombiano, Jairo Antonio Silva, el tema fue complejo de manejar porque a pesar de enviar los oficios correspondientes a la Alcaldía Municipal en el período anterior y dar curso al proceso que permitiría sepultar estos cadáveres, nunca se obtuvo respuesta positiva.
El mismo funcionario, que tiene a su cargo los departamentos de Nariño con sedes en Tumaco, Ipiales, Pasto y Túquerres, Cauca (Popayán y Santander de Quilichao) y Valle (Caicedonia, Sevilla, Roldanillo, Buga, Tuluá, Buenaventura y Cali), aseguró que este inconveniente solo se presentó en la ciudad de Tuluá, por cuanto en las otras localidades le dan celeridad a esta clase de situaciones.
Sobre los 13 cuerpos que reposan en las instalaciones de la Villa de Céspedes se indicó que corresponden a una mujer y 12 de sexo masculino, uno de ellos de 18 años de edad.
Igualmente se dio a conocer que solo se ha logrado establecer la identidad de siete de las personas fallecidas: Hugo Restrepo, Rubén Darío Ramírez Castañeda, Jorge Ramírez, Jesús Antonio Arcila Duque, César Arney Fernández, Gabriel Andrés Tabares Montoya y Jaime Leal.
¿Qué dicen en la Alcaldía Municipal?
Frente al tema en mención, el secretario de Gobierno Municipal, Coronel(r) Jorge Alexánder Gallego Chávez le informó a EL TABLOIDE que “las buenas noticias son que estamos ad portas de que se finiquite el proceso contractual para por fin darle cumplimiento a Medicina Legal y darle sepultura a estos cuerpos”.
Indicó así mismo que el proceso no se adelantó en la administración anterior “por falta de voluntad política, lo que es muy delicado, porque aparte de no darle a estas personas una sepultura digna, se estaba generando un problema de salud pública”.
El funcionario precisó que la sepultura colectiva de estas 13 personas se estaría dando máximo en ocho días y para el mismo se tiene previsto realizar un acto simbólico.
Finalmente hizo referencia a que varias de las muertes de estas personas se dieron de forma violenta, por lo que aún hacen parte de investigaciones y deberán ser sepultadas, mas no cremadas.
De esta forma se les dará cristiana sepultura a estos seres, cuyos cadáveres, nunca llegaron a reclamar familiares o allegados.