Es conocer gente, es visitar lugares, que si no fuera por el arbitraje, nunca hubieras conocido. Es disfrutar haciendo lo que más te gusta e intentando hacerlo cada vez mejor.
Porque, ser árbitro no es una forma de hacer deporte, es una forma de vida. Para la gran mayoría no es trabajar, es disfrutar.
DATO: La labor del árbitro no tiene el reconocimiento de los aficionados que creen que se las saben todas.
Luis Alfonso Sánchez González nació el 22 de septiembre de 1980 en Zarzal Valle. Sus estudios de primaria los realizó en la escuela Sagrado Corazón de Jesús y el bachillerato en el colegio Simón Bolívar de la Tierra del Coclí.
De niño soñaba con jugar fútbol profesional. A los 15 años empezó su carrera de árbitro, igual era jugador en esa época de la selección Zarzal y representó al municipio en los Juegos Departamentales de Jamundí en 1997. Desde ese año se dedicó de lleno al arbitraje.
¿Quién lo motivó a ser árbitro?
Por la cultura del fútbol casi nadie quiere ser árbitro, pero cuando estaba en grado décimo, el profesor de educación física (Jair Cardona) era también árbitro municipal y nos empezó a dar clases de reglamentación en deportes. También estaban creando un colegio arbitral en el municipio y el profe Jair me invitó, y así comienzo esta carrera. Posteriormente, en un curso departamental me vio arbitrar en una práctica el presidente de ese entonces, Carlos Hernán Fajardo y me descubre como árbitro. Decía que yo iba a llegar al fútbol profesional.
¿Y cuándo debutó como árbitro?
Mi debut se dio en 1995 en un torneo municipal donde jugaban un equipo de Zarzal contra uno de Roldanillo y, en 1996 ingreso al Colegio de Árbitros del Valle. En el fútbol aficionado he arbitrado cientos de partidos, porque aún estando retirado del FPC sigo dirigiendo a nivel aficionado.
¿A quiénes admiraba?
Mis referentes en el arbitraje eran Jorge Hernán Hoyos (nacional) y Jorge Larrionda (internacional).
¿Cuándo llegó al arbitraje profesional?
Llego al FPC después de hacer mi carrera en la primera C que inicié en 1998, luego en la B que debuto en el 2001 y mi primer partido en la categoría A se da el 12 de febrero el 2006 en el partido Envigado vs Once Caldas.
¿Qué es lo más difícil de la profesión?
Lo difícil de ser árbitro es que a pesar de ser humanos, no podemos equivocarnos, porque desde la misma dirigencia de este gremio solo importa el resultado y no se valora el proceso ni se reconoce el trabajo del árbitro desde la parte humana.
¿Fue difícil llegar a ser árbitro profesional?
En mi época era mucho más difícil llegar al FPC, incluso llevaba varios partidos o 2 años pitando en la categoría A y aún así no pertenecía a esa categoría porque debía superar los 15 partidos en primera para aparecer en ese escalafón. Hoy día muchos árbitros pertenecen a la categoría A sin haber debutado.
¿Su mayor satisfacción?
Para mí es motivo de orgullo haber estado en seis finales del FPC como árbitro central, haber tenido la oportunidad de dirigir partidos en Copa Libertadores, Copa Sudamericana y haber arbitrado en torneos suramericanos juveniles y eventos del ciclo olímpico.
¿Qué se necesita para ser árbitro ?
Las cualidades físicas del árbitro moderno requieren de buena resistencia, velocidad, potencia y el adaptarse fácilmente a los cambios de ritmo de un partido. Hoy se debe dedicar mucho tiempo a la preparación física, dado la evolución que en esta materia ha tenido el fútbol en los últimos años.
¿Su estadística nacional e internacional?
A nivel internacional en diferentes torneos, y en partidos amistosos de selecciones A tuve la oportunidad de dirigir 43 partidos y a nivel profesional dirigí 95 en la B y 345 en la A.
¿Jugadores que vio cuando se iniciaban?
Jugadores que tuve la oportunidad de ver jóvenes en sus equipos o selecciones y que luego fueron figuras internacionales: James Rodríguez, Hugo Rodallega, Teo Gutiérrez, Carlos Vacca, Giovani Moreno, Paul Pogba, Viniccius Jr., entre otros.
Ahora los árbitros se apoyan en el VAR. ¿Bueno o malo?
El VAR es una herramienta de gran ayuda para el arbitraje y el fútbol ya que apoya para que no se cometan injusticias por decisiones que tomen los árbitros en el campo de juego. Se requiere de paciencia para que el mundo de fútbol se adapte a esta herramienta tan tecnológica que, contrario a lo que promueven las reglas del fútbol (agilizar el juego, dinamizarlo y que haya más tiempo real del partido), se pierde tanto tiempo y se corte el ritmo del partido con las revisiones.
¿Lo ultrajaron?
Sólo fui agredido una vez, en mis inicios en el arbitraje aficionado. (Tenía 16 años).
¿Para usted qué es el arbitraje?
Fui completamente feliz, el arbitraje era mi droga, era mi pasión y disfruté cada momento que me permitió vivir dentro y fuera de la cancha.
¿Lo que menos le gustó?
Lo que menos me gusta es que no se reconozca al árbitro desde la parte humana, que solo se vea el resultado y se atente contra la dignidad y la integridad de un árbitro por cometer un error.