García Parra plasma en este texto cuentos y relatos de calidad literaria, fruto de la imaginación e inspiración del autor. Gran parte de su trayectoria literaria la ha realizado en territorio hateño que lo considera como hijo adoptivo. “Vivo muy agradecido con La Unión, Toro, Roldanillo, Zarzal, El Dovio, Cartago, entre otras poblaciones, donde siempre han acogido mis obras y respaldado esta quijotesca tarea de escribir y publicar libros en Colombia”, precisó.