Esta es la mejor manera de adentrarse a la historia del barrio La Ceiba, uno de los más tradicionales del occidente de Tuluá ubicado en los limites de Playas, La Esperanza y Las Delicias, conformado en sus inicios por personas que laboraban en los ingenios azucareros de la región, gente buena y trabajadora.
Su desarrollo urbanístico en buena medida se dio en el marco del lugar donde se desde un comienzo se destinó como zona verde justamente donde está el gigante verde vigía de la comunidad.
Retomando deberes
Hasta hace un par de años, la Junta de Acción Comunal del barrio se encontraba acéfala, pero surgió el liderazgo de Margie Gálvez Hérmidas, quien asumió la presidencia de ese organismo para retomar las diferentes tareas.
“Por fortuna he contado con el respaldo de la comunidad en cada una de las tareas que se vienen desarrollando para el beneficio de todos, logrando por ejemplo embellecer el parque de juego para los niños y organizando actividades como la fiesta de Navidad, entre otras” dijo Gálvez Hérmida a EL TABLOIDE.
Buenas noticias
En la presente semana la comunidad del barrio La Ceiba recibió por parte de la Administración Municipal, a través de Infituluá, la noticia positiva de la puesta en marcha de las obras de intervención del parque principal.
“Es algo que hace rato veníamos solicitando y ahora nos confirman que se hará realidad, lo que nos pone muy contentos”, precisa la dirigente comunitaria.
Según se le informó, serán intervenidos los andenes, las materas, la cancha múltiple y otros espacios del lugar que es el punto de referencia del barrio.
Vándalos externos
Aunque el barrio La Ceiba es un sector tranquilo, hay una dificultad que se presenta y es con la gente que llega de afuera a espacios como el parque y la cancha de micro fútbol.
“Tenemos esa dificultad, pues hemos detectado que los daños a los tableros de la cancha de baloncesto y otros espacios han sido ocasionados por gente que llega de otros barrios”, precisa.
Problema de todos
La Ceiba no es ajena a una problemática que EL TABLOIDE ha encontrado en los diferentes sectores de la Villa de Céspedes y y tiene que ver con la inadecuada disposición de las basuras y la poca cultura ciudadana de algunos habitantes que llevan sus mascotas a las zonas verdes y no recogen los excrementos.
“Es un tema que nos preocupa, pues a pesar de las campañas que se hacen y los llamados permanentes siguen dejando la basura en las esquinas del parque y otros sitios de uso común”, precisa la dirigente.
Quieren alarma
Uno de los propósitos inmediatos de la junta comunal es la consecución de la alarma comunitaria.
“Ha sido un proceso algo dispendioso pues para poderla poner a funcionar se requiere participación de toda la comunidad y cuando son citados a asambleas la respuesta no es positiva, lo que dificulta el proceso”, puntualizó la líder comunitaria.
Margie Gálvez Hermida – Pdte. JAC Barrio La Ceiba
¿Qué le gusta y qué le cambiaría a su barrio?
Lo mejor del barrio La Ceiba sin duda alguna es la gente. Son buenas personas, trabajadoras, honestas y dedicadas a conservar la armonía del sector.
Es bueno tener un árbol icónico y representativo, pues la ceiba es el símbolo no solo del barrio sino de esta zona occidental.
La ubicación que tenemos cercana al centro y con dotación de todos los servicios básicos necesarios es otra de nuestras fortalezas.
Es importante también contar con dos parques y ahora que nos remodelen el principal vamos a quedar mucho mejor.
Le cambiaría solamente la actitud de algunos, que por fortuna son pocos y que siguen sacando la basura a destiempo y a sitios públicos como los dos parques que poseemos.
O los que les encantan las mascotas, pero las siguen llevando a las zonas verdes y no recogiendo sus excrementos.