En sus inicios se conformó el comité pro junta y lo componían las familias más prestantes: como son los Victoria, los Yusti, los Sheck, los Mercado y los Santa María.
En el año de 1964 dicho comité obtuvo la personería jurídica por parte del Ministerio de Gobierno.
Los datos oficiales indican que el barrio Victoria, en su versión original, estuvo compuesto por 52 manzanas, dimensión que cambió pues hace varios años el gobierno municipal autorizó la segregación de varios sectores dando origen a los barrios Franciscanos que lo conforman 2 manzanas, el Miraflores conformado por 5 y el Panamericano con tres.
El Victoria cuenta con cerca de 10.000 habitantes, en su mayoría propietarios de los predios, con una infraestructura que brinda calidad de vida a sus moradores, vías totalmente pavimentadas, la iluminación de las calles es buena, posee una sede de la Universidad del Valle en el casco del sector y reconocidas instituciones educativas.
El presente
Desde hace una década la Junta de Acción Comunal es regentada por Luis Eduardo Ayala, un reconocido dirigente que le ha dado una dinámica interesante al sector.
“Si me preguntan por logros, creo que el más importante fue el derribo de los muros del Gimnasio del Pacífico que le dio vida a lo que todos llamamos el Parque de la Familia, una zona verde que conseguimos en una lucha conjunta con la junta del barrio Fátima” dijo Ayala a EL TABLOIDE.
Hay que potenciarlo
Una de las tareas en las que trabaja el dirigente comunitario es lograr el mejoramiento del parque de La Familia. “Soy de la idea que a este sitio no hay que meterle más cemento y se debe enriquecer la zona verde y queremos que a la pista de Hockey se le ponga una cubierta para convertirlo en un escenario multipropósito para la práctica de varios deportes y la reunión de la comunidad del sector, los grupos de adultos mayores, jóvenes, entre otras actividades.
Falta señalización
El barrio Victoria es uno de los pocos que puede decir que el 100% de sus calles están pavimentadas, pero algunas de ellas les falta señalización.
“En mi periodo como concejal logré trabajar con mi equipo en la señalización de algunas vías pero aún faltan varias e incluso ya acusan deterioro de la capa de rodamiento”, afirma.
En ese orden de ideas señala que la carrera 34, desde el llamado Puente Negro hasta la 40, pasando por el Gimnasio del Pacífico, hay huecos que se convierten en un problema para los conductores.
Buena sede comunal
Otra de las potencialidades del barrio Victoria tiene que ver con la sede comunal, una de las más completas de Tuluá, donde además de las reuniones de la Junta se alquila a bajo costo para actividades comunales, deportivas y es la sede de dos grupos de adultos mayores del sector.
Luis Eduardo Ayala – presidente JAC barrio Victoria
¿Qué es lo mejor y qué le cambiaria al barrio?
Lo mejor que tiene el barrio Victoria es su gente. Aquí todos estamos atentos a los problemas de los vecinos, lo que necesitan, somos solidarios.
Y en mi caso tengo en la Junta Comunal un equipo de trabajo de kilates. Me siento 100% rodeado y cada proyecto en el que nos empeñamos lo sacamos adelante.
Tenemos una sede comunal que le permite a muchas mujeres formarse en artes y oficios y un puesto de salud de los mejores dotados del municipio que atiende a toda la comuna.
Aunque se presentan dificultades, tenemos un buen ambiente de seguridad gracias a la interacción entre vecinos.
Le cambiaría uno que otro vecino que son pocos responsables con sus mascotas y siguen dejando los excrementos en las zonas verdes y andenes del barrio. Ojalá cambien de actitud.