Es el sector urbano más poblado de la Villa de Céspedes, pues según las cifras cuenta con 2400 viviendas, lo que equivale a cerca de 12 mil personas.
“En este momento podemos dar un parte de que somos un barrio seguro, tranquilo, con algunas problemáticas como en todos los barrios y como en todo Tuluá pero nosotros prácticamente el flagelo de la violencia y las situaciones que se han dado últimamente no nos ha permeado ni tocado, afortunadamente” dijo Buitrago a EL TABLOIDE.
Males históricos
Recuerda el dirigente que Bosques de Maracaibo nació con muchas problemáticas, empezando por los pasajes que por la cercanía entre vecinos complica la convivencia y lo segundo, las calles que less entregaron fueron las calles asfaltadas con un material llamado crudo de castilla que se deterioraron rápidamente.
“De a poco se han ido recuperando las calles y hoy tenemos un 30% en mal estado y esperamos que el gobierno municipal se fije en nosotros y llegue con la obras que necesitamos” precisa el vocero comunitario.
Entre las obras urgentes están la entrada por la manzana 1, la salida por la manzana 69, que tiene huecos muy grandes. También es urgente que se proyecte la apertura de una nueva vía que conecte al barrio con la vía a Tres Esquinas, a la altura de la Hacienda La Chica, para contar con un anillo vial distinto.
Un coliseo cubierto
Uno de los escenarios más deseados es uno cubierto que nos sirva para las diferentes actividades e incluso tener un espacio para albergar a las personas en caso de que Dios no lo quiera haya un evento catastrófico, pero en especial para atender a los integrantes del grupo de adulto mayor integrado por cerca de 150 señoras que hacen los ejercicios al aire libre en la cancha y a la intemperie.
“Muchas veces me toca traérmelas para acá, para Las Piscinas, pero necesitamos esa obra y yo pienso que cualquier alcalde que quiera hacer una inversión, pagarle la deuda social al barrio podría pensar en esa obra. Es un espacio pequeño que no requiere mucha inversión y además lograríamos apropiarnos de ese espacio, evitar que se convierta en “sopladero”, inodoro de perros y sitio donde la gente arroja los escombros” afirma el líder.
Justicia con el barrio
“Yo no estoy de acuerdo con esa política de los escasos recursos que tiene la ciudadanía para que el gobierno haga las obras” responde Héctor Fabio Buitrago al ser consultado si comparten la idea del alcalde Vélez de aplicar el modelo del 50/50 para avanzar en la recuperación de las vías.
“Nosotros venimos pagando impuestos. Este barrio tiene 2.420 viviendas, tiene más o menos 12.000 habitantes, entonces dígame cuánto le tributa este barrio al municipio y uno no ve una retribución para la comunidad. Yo soy de los primeros que voy a pagar impuestos, pero me da pesar porque si yo viera que en mi barrio se invirtieran recursos yo sería feliz yendo a pagar el impuesto y creo que muchos ciudadanos piensan lo mismo”, puntualizó.
La calle de Kaos, como se conoce esta vía, es una de las más afectadas y urge de atención.