De acuerdo con lo expresado por testigos del hecho, el estudiante salió de la institución a las 12:40 del mediodía cuando se le acercó un hombre armado que, tras amenazarlo con pistola en mano, le exigió le entregara el celular.
“Le pegó dos cachazos en la cabeza y luego le puso la pistola en el estómago y le dijo que desbloqueara el teléfono y le diera la contraseña sino quería que le disparara”, contó una persona que presenció el aterrador momento.
“Ya se podrán imaginar el daño psicológico que este hombre le causó al niño”, enfatizó el testigo que finalmente pidió a las autoridades policiales hacer acompañamiento a los estudiantes en los horarios de ingreso y egreso de las instituciones.