Con videos y fotografías habían evidenciado la presencia de personas con la pretensión de ingresar al plantel, pero no hubo eco a las solicitudes.
Solo unas horas después de las denuncias, los delincuentes pasaron de la amenaza a los hechos concretos y atracaron en la noche del domingo la tienda escolar dejando los estantes, las neveras vacías, pero además se alzaron con las sanducheras y la plata en sencilla que estaba destinada para la devolución de la semana que termina.
“Nos duele porque ya lo habíamos denunciado y ya empezaron por la tienda escolar y ahora nos preocupan los talleres, las salas de sistemas que están expuestas” dijo Martha Patricia Tovar, vocera de los padres de familia de la citada institución.