De acuerdo con la información conocida por EL TABLOIDE, la situación tendría su origen en una investigación que se adelanta y que ha permitido detectar prácticas indebidas en el uso de ese documento y que involucraría diferentes actores que tienen que ver con la movilidad.
Una fuente consultada y que pidió mantener su nombre en reserva, indicó que se ha detectado un carrusel con este documento y hay casos evidenciados en Tuluá, donde un SOAT ha sido “alquilado” 26 veces.
Indica la informante, que se volvió una práctica común que las personas sufran un accidente casero o en el que no se vio involucrado ningún vehículo y con la anuencia de algunas empresas de ambulancia e IPS se hacen atender con el seguro.
“Es tan grave la situación, que ante la avalancha de cobros, las aseguradoras han optado por investigadores, encontrándose con casos donde un paciente que está reportado con un accidente de consecuencias catastróficas, lo encuentran en casa sin, un rasguño y plácida-mente viendo televisión”, expresó la fuente.
Y como si fuera poco, a lo anterior se suma que algunas entidades de salud que atienden a pacientes accidentados, exprimen el SOAT en una buena cantidad de casos sin necesidad. “Ordenan exámenes especializados, radiografías, ecografía y hasta más y eso contribuye al desequilibrio financiero”, se indicó.
Otra cifra que contribuye a un panorama desolador y que está llevando al desespero a las aseguradoras, es el hecho que del parque automotor de motocicletas que circulan por el país, el 62.5 por ciento lo hace sin el documento. “Antes del famoso estallido social, ese porcentaje era del 35%, pero ahora la gente ha entrado en una rebeldía absurda y ya no adquieren el documento y mucho menos acatan las disposiciones”, dijo la fuente.
Las cifras
Para motos de menos de 100 el valor de $415.000 y más de 100 hasta 200 centímetros la cifra asciende a los $556.000, cifras que para la mayoría de usuarios resulta onerosa y hasta exagerada y para algunos sería una causante de desestimular la compra.
El análisis adelantado por el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, reveló que el 2021 cerró con 7.270 siniestros viales: “De esta cifra, 4.312 fallecidos corresponden a motociclistas, 1.566 a peatones, 852 a usuarios de vehículos y 471 a usuarios de bicicletas”.
“Desde el Gobierno nacional continuaremos trabajando para salvaguardar la vida de los colombianos en las vías. Nuestro llamado es a la prevención, a respetar los límites de velocidad, las señales de tránsito, a no manejar bajo los efectos del alcohol y a actuar de manera responsable con los demás”, expresó Luis Lota, director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, quien pidió a los alcaldes trabajar de manera intensa en las campañas de prevención para frenar la accidentalidad y sus consecuencias.